Santiago de Compostela. A Coruña.
P.2015 – O.2016
Fotografías Luis Díaz Díaz.
El nuevo local se encuentra en la planta segunda de un edificio exento destinado íntegramente a oficinas. El espacio no había sido ocupado y por tanto no estaba acondicionado. Únicamente contaba con unos aseos en uno de los extremos y la “infraestructura” básica que proporciona el propio edificio, (envolvente exterior, espacios comunes e instalaciones generales).
En la propuesta se mantiene la disposición de los aseos, ajustando su dimensión. Teniendo en cuenta la forma de la planta, prácticamente un cuadrado con ventanas en tres de los lados (fachadas sur, este y oeste), se plantea un espacio central al que se accede directamente, y que a través de un tratamiento diferenciado de su límite perimetral se presenta como el espacio representativo de la empresa. Este cerramiento interior gana espesor integrando, además de la estructura vertical existente, las nuevas instalaciones, zonas de almacenamiento y carpinterías interiores acristaladas que resuelven el acceso y la relación visual entre los diferentes espacios. Define toda la organización espacial y funcional, y se presenta como una piel de madera cuya geometría, materialidad y sistema constructivo, cualifica el espacio central estableciendo una relación que contrasta con los espacios perimetrales, más luminosos y con vistas.